Porque Se Le Sangra La Nariz A Los Niños

¿Por qué se le sangra la nariz a los niños?

Seguro que más de una vez te has preguntado por qué a los niños se les sangra la nariz con tanta frecuencia. Y es que, según los expertos, hasta el 60% de los niños menores de 10 años sufren una hemorragia nasal en algún momento de su infancia. Aunque, en la mayoría de los casos, no reviste gravedad, conviene conocer las causas y los posibles tratamientos para prevenirlas y evitar complicaciones.

Causas de las hemorragias nasales en los niños

Existen muchos factores que pueden causar hemorragias nasales en los niños, entre los más comunes se encuentran:

• Resfriados y alergias: La inflamación de la mucosa nasal, provocada por los resfriados o las alergias, puede resecar y debilitar los vasos sanguíneos de la nariz, haciéndolos más propensos a sangrar.
• Traumatismos nasales: Un golpe en la nariz o la introducción de un objeto en la fosa nasal puede dañar los vasos sanguíneos y provocar una hemorragia nasal.
• Sequedad del aire: El aire seco puede irritar y resecar la mucosa nasal, haciéndola más propensa a sangrar.
• Cambios hormonales: Los cambios hormonales asociados a la pubertad pueden hacer que los vasos sanguíneos de la nariz se dilaten y se vuelvan más frágiles.
• Uso de determinados medicamentos: Algunos medicamentos, como los anticoagulantes y los antiinflamatorios no esteroideos, pueden aumentar el riesgo de hemorragias nasales.

¿Cuándo acudir al médico?

En la mayoría de los casos, las hemorragias nasales en los niños no son graves y se detienen por sí solas en pocos minutos. Sin embargo, es importante acudir al médico si:

• La hemorragia nasal es abundante y no se detiene después de 20 minutos.
• El niño tiene hemorragias nasales frecuentes (más de dos veces al mes).
• La hemorragia nasal va acompañada de otros síntomas, como fiebre, dolor de cabeza o visión borrosa.

Cómo prevenir las hemorragias nasales en los niños

Existen algunas medidas que se pueden tomar para prevenir las hemorragias nasales en los niños, entre ellas:

• Mantener la humedad del aire: Utilizar un humidificador en casa o en la habitación del niño puede ayudar a prevenir la sequedad del aire y reducir el riesgo de hemorragias nasales.
• Evitar los traumatismos nasales: Enseñar al niño a evitar meterse los dedos en la nariz y a tener cuidado al practicar deportes o realizar actividades físicas que puedan provocar un golpe en la nariz.
• Tratar las alergias: Si el niño tiene alergias, es importante tratarlas adecuadamente para reducir la inflamación de la mucosa nasal y el riesgo de hemorragias nasales.
• Evitar el uso excesivo de medicamentos: Algunos medicamentos, como los anticoagulantes y los antiinflamatorios no esteroideos, pueden aumentar el riesgo de hemorragias nasales. Es importante seguir las instrucciones del médico y evitar tomar estos medicamentos durante un periodo prolongado de tiempo.

Conclusión

Las hemorragias nasales son un problema común en los niños, pero en la mayoría de los casos no son graves y se detienen por sí solas en pocos minutos. Sin embargo, es importante conocer las causas y los posibles tratamientos para prevenirlas y evitar complicaciones. Si el niño tiene hemorragias nasales frecuentes o abundantes, es importante acudir al médico para descartar cualquier problema de salud subyacente.

Porque Se Le Sangra La Nariz A Los Niños

Nariz kering dan iritasi.

• Alergi.
• Pilek.
• Udara kering.
• Trauma hidung.

Jika perdarahan sering terjadi atau berlebihan, sebaiknya segera periksakan ke dokter.

Alergi.

Las alergias son una causa común de hemorragias nasales en los niños. Cuando un niño es alérgico a algo, como el polen, el polvo o los ácaros del polvo, su sistema inmunitario reacciona produciendo anticuerpos. Estos anticuerpos se unen a los alérgenos y liberan histamina, una sustancia química que provoca inflamación en las fosas nasales. La inflamación puede irritar y resecar la mucosa nasal, haciéndola más propensa a sangrar.

Además, las alergias también pueden provocar congestión nasal, lo que puede dificultar la respiración por la nariz. Esto puede hacer que el niño respire por la boca, lo que puede resecar aún más la mucosa nasal y aumentar el riesgo de hemorragias nasales.

Si su hijo tiene alergias, es importante tratarlas adecuadamente para reducir la inflamación de la mucosa nasal y el riesgo de hemorragias nasales. El médico puede recomendar medicamentos para la alergia, como antihistamínicos o descongestionantes, o puede remitir al niño a un alergólogo para que realice pruebas de alergia y elabore un plan de tratamiento personalizado.

Además de los medicamentos, hay algunas medidas que se pueden tomar para reducir el riesgo de hemorragias nasales en los niños alérgicos, entre ellas:

• Evitar la exposición a los alérgenos. Si su hijo es alérgico al polen, por ejemplo, trate de mantener las ventanas y puertas cerradas cuando el recuento de polen sea alto.
• Utilizar un humidificador en casa o en la habitación del niño. El aire húmedo puede ayudar a prevenir la sequedad de la mucosa nasal y reducir el riesgo de hemorragias nasales.
• Irrigar la nariz del niño con solución salina. La solución salina puede ayudar a limpiar la mucosa nasal y reducir la inflamación.

Si su hijo tiene hemorragias nasales frecuentes o abundantes, es importante acudir al médico para descartar cualquier problema de salud subyacente.

Pilek.

El resfriado común es otra causa frecuente de hemorragias nasales en los niños. Cuando un niño está resfriado, la mucosa nasal se inflama y se irrita. Esto puede hacer que los vasos sanguíneos de la nariz se dilaten y se vuelvan más frágiles, lo que aumenta el riesgo de hemorragias nasales.

Además, los niños resfriados suelen sonarse la nariz con frecuencia, lo que puede irritar aún más la mucosa nasal y aumentar el riesgo de hemorragias nasales.

Para prevenir las hemorragias nasales causadas por el resfriado, es importante mantener la humedad del aire en casa o en la habitación del niño. Esto se puede hacer utilizando un humidificador o colocando un recipiente con agua cerca de la fuente de calor.

También es importante que el niño se suene la nariz suavemente y con cuidado. Si el niño se suena la nariz con demasiada fuerza, puede irritar aún más la mucosa nasal y aumentar el riesgo de hemorragias nasales.

Si su hijo tiene hemorragias nasales frecuentes o abundantes, es importante acudir al médico para descartar cualquier problema de salud subyacente.

Por último, es importante recordar que el resfriado común es una enfermedad viral y no se puede tratar con antibióticos. El tratamiento del resfriado se centra en aliviar los síntomas, como la congestión nasal, la tos y la fiebre.

Udara kering.

El aire seco puede resecar e irritar la mucosa nasal, haciéndola más propensa a sangrar.

• Baja humedad: Cuando el aire es seco, la humedad relativa del aire es baja. Esto puede resecar la mucosa nasal y hacerla más propensa a sangrar.
• Calefacción central: El uso de la calefacción central en invierno puede resecar el aire de la casa. Esto puede aumentar el riesgo de hemorragias nasales, especialmente en los niños que ya son propensos a ellas.
• Viajes en avión: El aire en los aviones suele ser muy seco. Esto puede resecar la mucosa nasal y aumentar el riesgo de hemorragias nasales, especialmente en los niños que viajan con frecuencia.

Para prevenir las hemorragias nasales causadas por el aire seco, es importante mantener la humedad del aire en casa o en la habitación del niño. Esto se puede hacer utilizando un humidificador o colocando un recipiente con agua cerca de la fuente de calor.

También es importante evitar el uso excesivo de la calefacción central y viajar en avión con frecuencia si el niño es propenso a las hemorragias nasales.

Si su hijo tiene hemorragias nasales frecuentes o abundantes, es importante acudir al médico para descartar cualquier problema de salud subyacente.

Trauma hidung.

Un traumatismo nasal es cualquier lesión en la nariz que puede causar sangrado. Los traumatismos nasales pueden ser causados por una variedad de cosas, como un golpe en la nariz, una caída o una lesión deportiva.

Los traumatismos nasales pueden causar hemorragias nasales porque pueden dañar los vasos sanguíneos de la nariz. Los vasos sanguíneos de la nariz son muy frágiles y pueden romperse fácilmente, incluso con un traumatismo menor.

Además, los traumatismos nasales también pueden causar inflamación en la nariz. La inflamación puede irritar y resecar la mucosa nasal, haciéndola más propensa a sangrar.

Si su hijo sufre un traumatismo nasal, es importante detener la hemorragia nasal inmediatamente. Para ello, puede aplicar presión directa sobre la nariz del niño con un paño limpio o una gasa. También puede elevar la cabeza del niño para ayudar a detener el sangrado.

Si la hemorragia nasal no se detiene después de 10 minutos, es importante acudir al médico. El médico puede cauterizar el vaso sanguíneo sangrante o realizar otros procedimientos para detener la hemorragia.

Para prevenir las hemorragias nasales causadas por traumatismos nasales, es importante enseñar al niño a evitar meterse los dedos en la nariz y a tener cuidado al practicar deportes o realizar actividades físicas que puedan provocar un golpe en la nariz.